Eustat, el Instituto Vasco de Estadística y el Departamento de Seguridad del Gobierno Vasco han dado a conocer los datos de violencia sexista de 2020. En Hondarribia, las denuncias descendieron en el primer año de pandemia, volviendo a los datos de 2018. Sin duda, son datos condicionados por el confinamiento.
En total, el Departamento de Seguridad recibió 28 denuncias: 22 por violencia ejercida por la pareja o expareja, 5 por violencia intrafamiliar y 1 por violencia sexual. El año anterior, en cambio, se registraron un total de 40 denuncias: 32 por violencia ejercida por la pareja o expareja, 2 por violencia intrafamiliar y 6 denuncias de violencia sexual.
Las medidas impuestas en estado de alarma limitaron el ocio y el movimiento de las personas, lo que puede explicar el descenso en las denuncias no familiares. Sabíamos que eso iba a pasar durante el encierro: las víctimas no denuncian a sus agresores porque tienen que seguir conviviendo con ellos.
En cambio, las denuncias por violencia intrafamiliar han crecido de 1 a 5 casos. Aquí también se aprecia el efecto del confinamiento.
Los datos de 2020 son mejores que los de 2019. El año pasado hubo menos denuncias que hace dos años, pero hay que tener en cuenta que fue un año muy especial y que probablemente ha influido en el número de denuncias. Pese al descenso en los datos, el año pasado se interpusieron 28 denuncias en Hondarribia. La situación sigue siendo grave. La sociedad de Hondarribia está trabajando firmemente para erradicar la lacra de la violencia sexista, pero queda mucho camino por recorrer.
